Del texto de Fatima Ramadan en Mahala to Cairo:
"El número de protestas durante la primera mitad de septiembre de 2009, registra 40 protestas en sendos puestos de trabajo. El número de protestas en zonas industriales fueron tan sólo de 10. Si bien el número de protestas en el sector de servicios fue de 30. El sector con más protestas fue el sector textil con 5, mientras que en el sector de servicios fueron las protestas del personal, con 5 y 6 protestas en los sectores médico y del transporte, respectivamente, las que tuvieron mayor nombre.
El número de seguimiento de la participación en huelgas, bloqueos, vigilias o manifestaciones llegó a 11.500 trabajadores, mientras que las amenazas de provocar movilizaciones llegaron a 52 mil trabajadores, incluyendo los 48 mil trabajadores de la Autoridad del Transporte que amenazan con volver a la huelga, a causa de la ruptura de las promesas que provocaron el fin de la anterior huelga. En este momento se ha producido la ruptura con los expertos del Ministerio de Justicia, cuya negociación duró dos meses tras las promesas de Fathy Sorour, portavoz de la Asamblea del Pueblo (Parlamento), tras estudiar sus demandas y trabajar por conseguirlas. Continuaron con sus huelgas y parones los trabajadores de Tanta para el algodón, entrando en el mes número 4 en medio del anuncio de funcionarios públicos, publicado en medios oficiales, de buscar una solución tras el Eid (la festividad de 3 días con la que se pone fin al mes de Ramadán).
Fue la causa más común de huelga durante éste periodo las peticiones de retribución variable, repetida 19 veces. Y fue a la cabeza de las reclamaciones en éste periodo las peticiones de subsidio por Ramadán, Eid y para la escuela. Los trabajadores de tintes blancos realizaron un parón durante varias horas para reclamar por ellos. También lo hicieron en la fábrica de molinos cilíndricos Nasser en Asuán y trabajadores de la Autoridad del agua potable en Cairo así cómo en las ambulancias de Ismaeliya, La siguiente causa de huelga fueron las protestas contra el despido, reubicación laboral y por los derechos de trabajo, repetida durante 14 ocasiones. Desde trabajadores de Amon para las medicinas hasta del transporte comunitario en Alejandría pasando por los médicos forenses o los trabajadores temporales del Departamento de Agricultura en Dakhlia, además de la queja de la fábrica de papel en Asuán, a causa del paro de producción tras la subida del precio del diésel o reclamaciones de los propietarios de tuk tuks (moto-taxis) para poder reemprender su trabajo.
Entre las 40 protestas hay tan solos dos casos en los que los trabajadores pudieron conseguir sus demandas o parte de ellas. Ésto sucedió con los trabajadores de Abu Siba, los cuales cortaron la carretera y se sentaron enfrente del Ayuntamiento antes de regresar y envolver la fábrica por la mañana, impidiendo al director salir de su oficina frustrando cualquier intento de contrabando hasta que fue obligado a aceptar el pago de las dos últimas mensualidades. Independientemente, al cabo de un par de días prometió un nuevo plazo de pago. Algo parecido sucedió con los operadores de cilindros de gas en Dakhlia. Se sentaron frente a la estación de gas, negándose a romper la movilización y amenazando con destrozar los conductos de gas si no se asumían sus salarios."
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